Civiles
Civiles
Un principio básico, y que el liberalismo acoge como propio, es que en
casa se aprende valores, modales, buenas costumbres sociales, responsabilidad.
En cambio en las aulas escolares el deber es instruir en las áreas básicas para
la formación de futuros profesionales en el espacio que mejor se pueda
desempeñar, reforzando de igual manera las herramientas adquiridas en el hogar
y que le ayudará a desenvolverse en la sociedad.
Esto ha venido siendo así en muchos grupos familiares por largo tiempo,
pero no se ha de esconder que en numerosas ocasiones en las aulas también se
viene impartiendo ideologización y culto a la personalidad, en específico al
militarismo, que ha sido el mal generalizado en toda Latinoamérica gracias a la
constante colaboración que ha habido en algunos núcleos familiares, en muchas
ocasiones disfuncionales por completo, que tiene una fuerte ausencia paterna
dando como consecuencia que se desarrollen pensamientos únicos e impositivos.
Argentina lo vivió con Perón, República Dominicana con Trujillo, Cuba
con Castro y Venezuela la lista es bien larga, desde la época colonial a
nuestros días el culto al uniforme ha sido un mal enraizado y por factores
culturales, ha sido la misma población la que lo ha profundizado. Cuando la gente
repite sin saber: “cuando Gómez…” o “cuando Pérez Jiménez…” sin darse cuenta el
espaldarazo que le están dando a los futuros “galácticos” en querer tomar el
poder sólo porque piensan que ellos son los únicos llamados a ser quienes
dirijan la nación. Quitándole el espacio natural a los factores civiles.
Queda de parte nuestra no sólo reforzar los valore, modales, buenas
costumbres, responsabilidad, entre tantas cosas y enseñar que sólo en un país
con principios y libertades es que realmente podemos emerger de este
pensamiento retrogrado militarista que se ha instaurado y nos ha llevado en los
últimos años al socialismo del siglo XXI. Para ello lo recomendable sería
acostumbrar a las nuevas generaciones a no idolatrar a tantas figuras militares
y mostrarle que ha habido siempre civiles que han hecho mucho más por el
crecimiento de nuestra nación que las charreteras de turno.
Preguntará
alguno, ¿Cuáles Civiles? Les dejo los datos de un libro que les puede ayudar a
saberlo. Civiles de Rafael Arráiz Luca. En este maravilloso
texto nos dice el autor: “Ninguno
de estos venezolanos empuñó las armas para incidir sobre la realidad. Sus
instrumentos fueron otros: la palabra, el estetoscopio, el pincel, el
crucifijo, la regla de cálculo, el croquis, los códigos”.
Lic. José Francisco Marcano S.
Ig: @jfranciscomarcano
Tw: @jfmarcano
Les invito a leer mi libro “7
Textos caraqueños” con introducción escrita por el Dr. Ítalo
Tedesco.
interesante el artículo, José. el meollo de estos temas de "un nuevo ciudadano" es cómo plantar esa semilla constructiva en los niños. quienes tradicionalmente, quienes tienen esa delicada labor no están capacitados o no son conscientes de esa responsabilidad. anoche, por ejemplo, estaba con mi esposa en una exposición-conversatorio de fotografía en Los Palos Grandes y una señora le dijo al expositor: "¿cómo hacer que los jóvenes le tomen más amor a su tierra?". yo pensé de inmediato que lo inicial era hacerles saber que esta tierra tan maltratada y destrozada era suya y que ellos tenían alguna responsabilidad... uno sale a la calle y lo que hace es ver desamor. es difícil plantar la semilla correcta y oportuna en un pequeño con tanta ventisca alrededor.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo y confío en que la gente tome conciencia para mejorar y salir de este desastre en que estamos. Sólo así podremos avanzar sino nos queda seguir en lo mismo por mucho tiempo más. Cuba es un ejemplo.
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