Reflexiones: Maneras de ver el reciclaje

 

Reflexiones: Maneras de ver el reciclaje

 

Cuando nací, a mediados de los ‘70, ya existían movimientos de reciclaje, particular en los países más desarrollados. Cuando estaba en el jardín de infancia y primaria, recuerdo muchas actividades que se hacían con material de desecho, que al final igual todo iba a parar al cesto de la basura porque no pasaba de ser una actividad y un producto que no perduraría en el tiempo, a menos que alguien lo valorara tanto que lo guardara como recuerdo.

 Esta práctica de hacer objetos con material reciclable, le ha dado con el tiempo a algunas personas una capacidad de resolver contratiempos desarrollando una capacidad “ingenieril” y algunos con los años hasta llegan a ser muy buenos ingenieros, mecánicos o “toderos” (en Venezuela le llamamos así a aquellas personas que hacen de todo: albañil, herrero, carpintero, etc.), gracias a que desarrollan esa capacidad de resolver con lo que tengan a la mano.

Pero la realidad es que no todo el mundo puede desarrollar estas habilidades y no se convierten en reciclador, por ello siempre todos aquellos materiales que podrían ser reciclados, terminan en la basura. Debido a esto, en los países más desarrollados han implementado la selección de desechos con el fin de que sean recolectados por empresas, y así disminuir el impacto ambiental.

Naciones que no salen de su estatus “en vías de desarrollo” este tipo de políticas no suelen ser muy perseverantes, aunque todo el tiempo hay iniciativas para ello, pero difícilmente se mantienen gracias al desorden social en que se vive el día a día. No hablamos sólo de la realidad venezolana, sino en toda la región. Siempre ha habido dificultades que no han permitido mantener en el tiempo iniciativas ecologistas y las pocas que se sostienen, suelen ser por alguna rentabilidad particular que ha tenido algún emprendedor, que en muchas ocasiones su iniciativa no pasan de una medianas empresas.

Gracias a esta realidad y teniendo en cuenta la importancia que existe de proteger al planeta de la destrucción que el humano ha realizado durante mucho tiempo, es que algunos movimientos de la nueva izquierda se han apoderado de la bandera del rescate del medio ambiente, cuando la realidad se ha demostrado que los emprendimientos particulares y privados son los que realmente han hecho un trabajo constante en pro del planeta, y no las políticas expoliadoras dictadas desde los gobiernos en contra de las industrias, para sacar una tajada monetaria que va a para a algunas Organizaciones No Gubernamentales y partidos políticos que viven del lobby sucialista.

  Crecí en un medio social que tiende a ser conservacionista, soy de los que evita tomar bolsas plásticas de no ser necesario, evito no despilfarrar agua en un país donde las calles brotan de las tuberías rotas por falta de mantenimiento, y así un sinfín de hábitos que van en pro de la sustentabilidad del medio ambiente, y como saben soy de las personas que están años luz de las ideas sucialistas, mas por tener ideas conservacionistas, veo a analfabetos funcionales tildando posturas como la mía de “liberprogre” porque uno no se comporta como ellos, todo porque son colectivistas de derecha que no usan la mono neurona para analizar simples ideas robadas por los zurdos, y sólo repiten, al igual que sus pares los colectivistas de izquierda, lo primero que digan los influencers de turno.

Si no se tiene cerebro suficiente para hacer críticas constructivas y ser proactivo, no se pueden llamar Liberales, son cualquier otra cosa menos Liberales.

Lic. José Francisco Marcano S.

Ig: @jfranciscomarcano

Tw: @jfmarcano

 

Les invito a leer mi libro “7 Textos caraqueños” con introducción escrita por el Dr. Ítalo Tedesco