40 años de democracia
40 años de democracia
En un chat para discusiones de temas políticos, el organizador pidió la
opinión sobre: Mitos y realidades de la
república civil y democrática 1958-1998, ya sobre este tema he escrito en múltiples
oportunidades, pero en esta ocasión lo haré como una brevísima respuesta, daré
mi apreciación sobre un punto fundamental de este período de la República, es
decir mi visión del porqué estamos como estamos.
Venezuela, que no se diferencia mucho de otras naciones latinoamericanas
pasó todo el siglo XIX en guerras internas que, en nuestro caso, terminaron apaciguándose
en las primeras décadas del siglo XX con un Gendarme
Necesario, como lo llamó Vallenilla
Lanz. Esto dio cierta estabilidad política que permitió a empresas extrajeras
invertir en el país, dejando unas bases mínimas para que poco a poco se fue
desarrollando este.
Ya acercándose a mediados del siglo, en octubre de 1945, el partido Acción
Demócrata se embarca en una aventura golpista por no estar de acuerdo con el
candidato que quedaba por consenso de las fuerzas políticas dominantes, Ángel
Biaggini quien se desempeñaba como Ministro de Agricultura para aquel momento,
en el lugar de Diógenes Escalante que había sido descartado por su condición
mental.
Al lograr esta revolución de octubre, como se le llamo, Acción Democrática
abrió dos caminos a la vez; el primero, eliminar la elección presidencial que
solo la votaban los parlamentarios, esto habían sido así desde la fundación de
la república en 1830. Segundo, desarrollar políticas de corte socialista en un
país que jamás lo había experimentado. Tres años después los nacionalistas
retomaron el poder, pero ya había quedado esparcidas las semillas izquierdistas.
Al caer la dictadura de Marcos Pérez Jiménez en 1958 y llegar nuevamente
el partido socialista de corte aprista, como bien lo explica Carlos Rangel en sus libros, sobre todo Del buen salvaje al buen revolucionario,
ya las políticas socialistas combinadas con literatura keynesiana, y con cuanto
estatista apareció en el horizonte, fueron dándole forma a una nueva mentalidad
en las masas que poco a poco se fue acostumbrando a que el Estado les
resolviera todo.
Como contraparte a los adecos se presentaba el partido Copey, también de
corte socialista pero con influencias cristiana, mas los desconocedores de ideologías
lo tildaban de derecha, cuando en realidad eran los mismos pero con metodologías
más conservadoras.
Así recorrió el periodo democrático nacido de la mano de socialistas light en los primeros 40 años, esto a la
larga ha generado a una sociedad que se ha acostumbrado a la presencia del Estado
en todo, desde industrias de todo tipo en manos de burócratas, educación
pública y privada con formación progresista, salud dependiente de políticas centralizadas
en ministerios discrecionales y un largo etcétera. Esto ha llegado a tal punto,
que es cuesta arriba poder explicarle a la gente común que el problema que hoy padecemos
en la nación venezolana es de base, y que la única forma de zafarse de esta situación,
es hacer lo que han hecho naciones como Polonia, Estonia, República Checa, Singapur,
Corea del sur o Taiwán, si es que realmente queremos salir de esta pesadilla
desarrolladas por socialista radicales que se hacen llamar del siglo XXI, producto
de aquellas semillas sembradas hace ya unos 75 años y que hoy dan los frutos
amargos de la radicalización a las nuevas generaciones que no la escogimos.
Lic. José Francisco Marcano S.
Ig: @jfranciscomarcano
Tw: @jfmarcano
Les invito a leer mi libro “7
Textos caraqueños” con introducción escrita por el Dr. Ítalo Tedesco

Excelente. Totalmente de acuerdo, el cambio no basta cambiando representantes en el Estado, que sencillamente piensan igual a los que han estado gobernando, pero, "son más buenos como socialistas."
ResponderEliminarTal cual, lo importante es que la gente se haga consciente y estudiar todos aquellos que hacen política para descartar a los que traen sus ideas sucialista y darle paso a quienes tiene una manera más liberal de llevar las riendas del país, de otra manera no saldremos de este fago progresista.
EliminarGracias por comentar.
Saludos.