Reflexiones: Queremos trabajar


Reflexiones: Queremos trabajar

En Venezuela tenemos otros problemas aparte del COVID-19 que nos opaca esta realidad, aquí ya estamos sufriendo de penurias económicas desde hace muchos años, por ello vemos como mucha gente sale a la calle a trabajar porque no tienen ni para comer ese día. Esto no sólo sucede en nuestro país, lo vemos en toda la región, así que aquí al final de la historia se hará por la vía de los hechos, las teorías del Primer Ministro Británico y el Presidente de la República Federativa del Brasil. Todo siga igual, se contagie la población, se autoinmune sola y se muera el que no resista.
El caso es que en toda la región no se cuenta con ayudas a las personas para que lo último, “muera el que no resista”, no pase de forma exagerada. Según las estimaciones de muerte del COVID-19 es del 1% de todos los afectados, pero en un país con tantas carencias como el nuestro y en muchos de los vecinos, ese porcentaje podría ser muchísimo más alto.
Lo está viendo Guayaquil en Ecuador, donde se ven imágenes similares a las vistas en Wuhan hace algunos meses. Personas que caen muertas en las calles y, en el caso de esta nueva nación infectada, denuncias de cadáveres con días en plena vía pública.
Latinoamérica tiene una taza de informalidad demasiado alta, esto implica que casi un 90% de las personas viven del día a día, son pocas las personas que tienen alimentos para unas semanas y casi nulas las que puedan tener a largo plazo, y esto es el principal problema.
En la región son inexistentes los que tienen esas ideas de que el mundo se va a acabar por algún colapso mundial. A diferencia de algunas comunidades en los EE.UU. o Inglaterra, donde existen personas conocidas como Preppers que están preparados para vivir en estados de alteraciones del orden local, nacional o mundial. Eso no existe aquí.
Por ello veo con cierta preocupación que Venezuela y buena parte del subcontinente va a tener una alta afectación del virus y posiblemente una gran cantidad de decesos. Porque veo demasiado cuesta arriba que las personas estén en casa más de un mes, cuando ya hay estimaciones de que no bajaría de tres meses esta situación.
Lic. José Francisco Marcano S.

Ig: @jfranciscomarcano

Tw: @jfmarcano


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